Una vida monástica
En el corazón del Parque Brenne, las Hermanitas Discípulas del Cordero cultivan sus huertos de hierbas según la más pura tradición monástica y ancestral. La comunidad está formada por monjas sin discapacidad y monjas con síndrome de Down.
Con pasión, autenticidad y respeto por la naturaleza, participan con cariño en la cosecha y creación de la gama Still’Amoris «Belleza»: La Gota de Amor para tu piel.
Nuestra historia
El Instituto de las Hermanitas Discípulas del Cordero, con vocación contemplativa, es la primera comunidad de monjas que acoge, con reconocimiento canónico de la Diócesis de Bourges, la profesión religiosa conjunta de hermanas con discapacidad y hermanas sin discapacidad. Se dedican a Dios para formar una sola comunidad.
La comunidad, fundada en 1985, fue establecida en 1999 como Instituto Religioso de Vida Contemplativa por el Arzobispo de Bourges, Monseñor Pierre Plateau.
15 de diciembre de 2011: Monseñor Maillard, Arzobispo de Bourges, aprueba definitivamente las Constituciones del Instituto de las Hermanitas Discípulas del Cordero.
