«Las hermanitas siguen al Cordero adondequiera que va.» Apocalipsis 14:4

Las Hermanitas
Discípulas del Cordero

Hermanitas
sin discapacidad y con síndrome de Down

Una misma comunidad religiosa

«Debemos amar a los débiles y a los pobres porque Jesús se oculta bajo la apariencia de los pobres».

Madre Teresa

PARA UNA VIDA CONTEMPLATIVA

Nuestra vida contemplativa al servicio de las hermanitas, regulada y disciplinada por la oración y la actividad manual, ha sido moldeada y nutrida por la sabiduría de nuestros santos patronos: Santa Teresa del Niño Jesús y San Benito.

PERSONAS CON Y SIN DISCAPACIDAD

En nuestra opinión, y para hacernos eco de las primeras palabras de San Juan Pablo II, es una osadía decir "No tengan miedo" a un mundo donde el hombre tiene miedo del hombre, miedo de las fragilidades inherentes a su naturaleza y condición, como la discapacidad y la enfermedad.

EN EL TRABAJO Y LA ORACIÓN

Los oficios: Laudes, Vísperas y Completas, Adoración y Rosario.
Abierto a los fieles:
Misas de las Hermanitas: 11:00 h los martes
9:30 h los domingos

Para ayudarnos

Para apoyar a la comunidad de las Hermanitas Discípulas del Cordero, tienes varias opciones a tu disposición…

Actividades comunitarias

Tejeduría

La comunidad cuenta con muchos telares de madera. Cada hermana puede crear diversos artículos: bufandas, bolsos, objetos textiles, etc.

Culture des fleurs et production au prieuré des hydrolats et des macérais de fleurs sans additif chimique

Still'Amoris:

Una gota de amor para tu piel
Cosmética 100% natural
Plantas y flores cultivadas a mano en el priorato Nuestros nuevos productos Still'Amoris: una gota de amor para tu piel, ¡ya disponibles en nuestra tienda online stillamoris.com!

Cultivo de plantas aromáticas y medicinales

La comunidad cuenta con un jardín de plantas aromáticas y medicinales, y un huerto. Las Hermanitas también ayudan a cuidar el jardín. Elaboran infusiones y cosméticos 100% naturales para todo tipo de piel.

El priorato

Las Hermanitas tienen un priorato y una capilla en medio de un gran parque. Allí pueden acoger, durante un periodo de discernimiento vocacional, a jóvenes que estén dispuestas a dedicar su vida al servicio de Cristo en la persona de sus Hermanitas con síndrome de Down.